Haciendo gala de la astucia en su máxima expresión, sacando provecho de la oportunidad presentada y apuntando hacia la dirección correcta, el goleador volvió a sentirse clave. Solo tuvo que conectar el balón y enviarlo al fondo de la red, para abrazarse nuevamente a la gloria y reencontrarse con la mejor de todas sus versiones, nada menos que ante el vigente campeón de Venezuela y jugando a ganar.
Rayo Zuliano recibió a Carabobo en el “Pachencho” Romero, donde ganar era la premisa para los dirigidos por Javier Villafraz, quien le dio acceso al joven atacante a falta de 20 minutos para terminar la confrontación y cuando estaban perdiendo 1-0, debido al gol de Edson Tortolero.
“No pienso en otra cosa que no sea llegar lejos con mi equipo y volver a ser llamado a la selección. Sé que esa oportunidad va a llegar y por eso me estoy preparando todos los días”, agregó el juvenil.
Recientemente, Junior viajó a Europa para vivir una experiencia futbolística en aras de potenciar sus habilidades, y luego de incrementar los poderes que identifican a un atacante infalible, sueña con volver al viejo continente, pero con nuevos argumentos.
“Cuando ves otro mundo, sabes dónde quieres estar y cuánto tienes que trabajar. Me siento contento, también porque en Maracaibo puede verme mi familia y les dediqué este triunfo”, aseveró.
Colina jugó el Mundial Sub-17 del 2023, disputado en Indonesia, donde se dio a conocer ante los ojos del mundo como una alternativa al ataque en la libreta del técnico Ricardo Valiño.
“No nos sentimos menos que nadie y la muestra de eso es que llevamos tiempo trabajando juntos y cada vez estamos más unidos. Somos humildes, pero también personas que conocen sus capacidades y saben hasta dónde pueden llegar”, expresó “Junito”.
Al elenco occidental le restan dos encuentros, uno en Caracas, ante Deportivo La Guaira y otro en Maracaibo, contra Estudiantes de Mérida. Estar presentes entre los mejores ocho del país es la primera misión a cumplir y ser campeones, una misión que cada vez va tomando más y mejor forma.
