Por Ramon Vilageliu.
Hay muchos días que quedan marcados en el recuerdo. Y otros, que fácil se olvidan ya que se convierten en rutina. Pero la rutina no siempre es un problema, pero puede terminar aborreciendo debido a la falta de chispa en la vida. También es cierto que, si esos cambios se convierten en cambios para mal, tampoco interesa que varie mucho nada. Por tanto, mejor quedarse con lo que tienes, a veces, ya que esto nadie te lo puede quitar. Qatar 2022 nos está regalando jornadas de mucho interés, algunas con más goles, otras con menos, pero siempre con emoción. Como la que nos brindó un Argentina- Arabia Saudí que va a pasar a la historia de los mundiales.
Esa fue una mañana que terminó muy mal para los argentinos e inmejorablemente para los árabes. Una victoria frente a una de las principales favoritas. Hasta el príncipe del país decretó un día festivo. Y no es para menos. La Argentina de Messi naufragó. Una vez más. Tiene la suerte, sin embargo, que se trata del primer partido del torneo, y hay tiempo para remontar. Pero las sensaciones no son buenas. Como esas noches de fiesta que todo empieza mal y piensas: “Al final triunfaré”. Pero solo depende de ti que así lo hagas. Argentina aún está en la pelea, por supuesto. Pero empezar así te deja tocado, pero no hundido. De momento.
A los que es imposible hundir son a los franceses que siguieron con su racha de victorias en la Copa del Mundo. Los últimos campeones supieron sufrir por un rato ante Australia, pero impusieron su ley. La de Mbappe y compañía. La que persiste en el torneo pese a que un nuevo jugador clave de los bleus suma a la lista de lesionados. Lucas Hernández se rompió ayer los ligamentos cruzados. Los de Deschamps están tocados por una varita mágica, pero en el mal sentido. Puede ser que sea la del hermano de Pogba, conocido por contratar a un brujo para arruinarle la carrera a Kylian. Spolier, no le funcionó. Pero si que le funcionó para hacer que siete de los once posibles titulares no estén el Qatar por lesión. El mundo al revés. Y por si no fiera poco Giroud marcó un doblete después de no marcar ni un tanto en Rusia. Pero que trozo de delantero.
